A partir de la semana 38 de embarazo tu bebé puede llegar en cualquier momento por lo que debes estar preparada y tener todo listo para ir a dar a luz al hospital. No todas las embarazadas rompen aguas en casa, si no que la rotura de bolsa la realizan en el hospital una vez que confirman que el parto ha comenzado. ¿Cómo puedes saber entonces cuál es el momento de ir al hospital? Muy fácil, aprendiendo a diferenciar cuáles son las contracciones de parto. Además, estate tranquila: debes saber que romper aguas no es tan escandaloso como muestran las películas. En ocasiones es hasta un simple y lento goteo.

Lo primero: ¿qué es romper aguas?

Como ya sabrás, durante el embarazo el bebé está rodeado del líquido amniótico. Este líquido sirve para amortiguar y proteger al bebé, además de ayudar a que sus pulmones y su sistema digestivo se desarrollen. También sirve para mantener estable la temperatura del ambiente.

Durante la segunda mitad del embarazo, el líquido amniótico está formado en su inmensa mayoría por la orina del bebé, aunque también consta de nutrientes, hormonas y anticuerpos. Una de las primeras señales del inminente parto es la ruptura de las membranas del saco amniótico. Esta puede suceder antes, durante o al comienzo del propio parto. Es lo que se conoce como romper aguas. Sin embargo, no es la única señal que anuncia el inminente nacimiento del bebé, sino que hay otros síntomas del parto que debes saber para estar preparada para ir al hospital.

Si la rotura de aguas te pilla por sorpresa lo primero que debes hacer es mantener la calma. Los ejercicios de meditación y mindfulness pueden ayudarte tomar el control de la situación. Por lo general, una vez que rompas aguas, tienes tiempo de repasar que tienes todo listo y la maleta con las cosas que vas a necesitar. Dúchate y lávate el pelo, si quieres, el agua caliente te ayudará a relajarte, pero no te bañes y ni se te ocurra ponerte un tampón. Una vez rota la membrana debes tener cuidado de que ningún líquido u objeto entre en tu vagina, ya que al faltarle la capa protectora el bebé podría coger una infección.

Puedes comer o beber algo ligero (ligero, ¿eh?, nada de grasas). Un poco de miel disuelta en leche o en infusión te irá bien, vas a hacer un gran esfuerzo y necesitarás este aporte de glucosa. Mientras esperas a que te recojan, intenta relajarte. Recuéstate sobre el lado izquierdo si ya tienes contracciones y te resultan dolorosas, camina para que el bebé se encaje. Antes de dejar tu casa, ponte una toalla pequeña o una compresas para no sentirte incómoda ante la salida del líquido. También hay otros indispensables que debes llevar en la maleta para el hospital antes del parto.

Llegada al hospital para el parto

Cuando llegues al hospital seguirás el proceso normal de parto. Si hay contracciones, éstas irán siendo cada vez más seguidas, prolongadas e intensas, hasta que por fin salga el bebé. Y si no las hay, en la mayoría de los hospitales provocan el parto administrando oxitocina antes de que pasen 24 horas desde la rotura de la bolsa, dado que existe un cierto peligro de infección. Sobre todo, no te agobies, tu hijo va a nacer. También hay otros trucos naturales para provocar el parto.

¿Y si rompes aguas antes de la semana 34?

En un 2% de los casos la bolsa se rompe antes de las 34 semanas de gestación. Puede ser una fisura (un goteo), que podría volver a cerrarse, o una rotura, con salida de líquido abundante. En cualquier caso, como el bebé es prematuro, los médicos intentarán prolongar el embarazo y tomarán medidas para protegerlo.

Como el bebé no está suficientemente maduro y ha perdido la cámara estéril que lo protegía, los médicos te darán un antibiótico para evitar infecciones y controlarán que no se produzcan.
Por otra parte, como los pulmones del bebé en esta semana no están todavía maduros del todo, es muy probable que te administren esterocorticoides (en inyección) para ayudar así a que maduren más rápidamente. Puede que te prescriban el ingreso hospitalario.
Y lo más probable es que al alcanzar las 34-36 semanas de gestación te induzcan el parto.