7 Lecciones de liderazgo que nos enseña Juego de Tronos

¿Hay lecciones de liderazgo en esta serie? ¡Claro que sí! De hecho, es por eso que nos animamos a verla luego de haber estado reticentes a engacharnos con ella. Ahora ¡nos encanta! Así que luego de ver el final de la 7ma Temporada de Game of Thrones quisimos compartir contigo 7 lecciones sobre liderazgo que nos deja Juego de Tronos.

1. Lidera con el ejemplo

Un líder es alguien que puede servir de ejemplo e inspiración para su equipo. El líder asume responsabilidades y personifica los valores que desea que los otros sigan. Como líder debes recordar que tanto tus oponentes como tus seguidores te están observando.

"El hombre que dicta la sentencia debe blandir la espada" es una frase icónica de Ned Stark al comienzo de Games of Thrones y nos recuerda que el liderazgo también requiere que el líder sea capaz de arremangarse los puños de la camisa y tomar acciones, no importa cuán difíciles o desagradables sean.

Si bien, en las organizaciones no blandimos espadas ni cortamos cabezas, sí nos toca manejar situaciones difíciles como problemas dentro de los equipos de trabajo, procesos disciplinarios con los trabajadores, adelantar transformaciones que no son populares o enfrentar cambios y retos en el entorno de negocios que afectan negativamente a la compañía . En estos momentos críticos en que el líder debe ser reconocido como creíble, honorable y valiente podemos tomar las palabras de Ned Stark como referentes para la acción.

2. Acepta las diferencias

"La incompetencia no debe ser recompensada con lealtad ciega" dice Lord Varys a Daenerys Targaryen cuando ella le reclama por haber servido a varios reyes. En las organizaciones muchos líderes consideran que las diferencias, los mensajes de alarma y las advertencias que les realizan los miembros de su equipo son falta de lealtad.

 Un líder acepta las diferencias, las escucha y aprende a apalancarse en ellas para avanzar. Cuando un miembro de tu equipo te advierte de lo que considera un error, escúchale. La fortaleza de los equipos viene de la diversidad de perspectivas, habilidades y competencias. ¿Qué prefieres? Alguien que te advierta que estás a punto de estrellarte con una pared de hielo u otro que, viendo que vas contra la pared, te aplauda.

3. Afiánzate en tus fortalezas

"Nunca olvides quién eres, pues el mundo no lo olvidará. Has de eso tu fortaleza; entonces nunca podrá ser tu debilidad. Vístelo como una armadura y nunca podrá ser usado para lastimarte" este consejo de Tyrion Lannister a Jon Snow puedes aplicarlo a ti mismo. Para un líder lo primordial es saber quién eres, conocer tus fortalezas y tus áreas de mejora. Usa ese auto conocimiento como tu propio castillo, es decir, afiánzate en tu verdad y no pretendas ser lo que no eres. Entonces, desde esa verdad, nadie podrá lastimarte.

Para nosotras, el personaje de Tyrion Lannister es fascinante. Mariela dice que es "La Mente" en Juego de Tronos. Aunque parece pequeñín, sus habilidades como coach y negociador son brillantes. Este personaje hace de la inteligencia su punto fuerte. Tyrion inspira a sus aliados a descubrir sus fortalezas y usarlas para alcanzar sus objetivos.

4. Escoge tus batallas

Si bien en las organizaciones no tenemos que luchar contra dragones ni con el ejército de los Caminantes Blancos, no es menos cierto que lidiamos con alianzas y conflictos de poder. Por ello, un buen líder debe escoger en cuáles conflictos intervendrá para resolverlos y cuáles dejará que sean disueltos entre los miembros del equipo. Algunos líderes negativos disfrutan del conflicto y participan en cualquier escaramuza organizacional sólo por diversión.

Te dejamos este buen consejo de Ned Stark cuando le ofrecieron ir a un duelo con Jaime Lannister "No lucho en torneos porque cuando me toque enfrentarme en realidad con un hombre no quiero que sepa lo que soy capaz de hacer". Así que escoge tus batallas y mantente alejado de los torneos de oficina.

5. Está siempre dispuesto a aprender

Esta lección la recibimos por partida doble en Juego de Tronos. Por una parte Petyr "Meñique" Baelish nos recuerda que "El conocimiento es poder" y por la otra Tyrion Lannister nos dice que "Una mente necesita libros como una espada necesita ser afilada"

Sí, el líder necesita conocimiento y, para adquirirlos, también necesita la voluntad de aprender. Hay que tomar tiempo para estar informado de lo que ocurre en el ambiente de negocios regional, nacional y mundial; así como de lo que está sucediendo a lo interno de la organización.

6. Cree en tí mismo

Un líder que no cree en sí mismo difícilmente podrá inspirar a su equipo. Para tener confianza en ti mismo y tus habilidades es importante que sepas cuál es tu valor y lo respetes. Muchas veces el mayor enemigo que tenemos es esa vocecita interior que nos dice que no valemos. Nunca subestimes las cosas que puedes y que no puedes hacer cuando te toque liderar a tu equipo. Muestra lo que sabes hacer y mejora cada día. Una persona con confianza en sí misma también es capaz de rodearse de los mejores. Eres un líder así que actúa con la certeza y convicción de que es así.

Aunque a veces se puede pasar de arrogante, esta lección de confianza nos las da Daenerys Targaryen, la madre de los dragones, que sabe exactamente lo que merece y lo resume en esta frase: "No soy una mujer ordinaria. Mis sueños se hacen realidad"

7. La fuerza es la unión

El liderazgo implica inspirar a un equipo para que esté alineado y comprometido tanto con la causa como con las acciones a tomar; esto es crítico para el éxito en cualquier área y puede ser la clave para conseguir resultados asombrosos contra situaciones u oponentes formidables.

 La lección "La fuerza es la unión" se la da el Rey Robert a Cersei Lannister. Ella se queda confundida cuando el rey le pregunta:"¿Cuál número es más grande: cinco o uno?". Fastidiada por la pregunta ella responde: "Cinco" Entonces El Rey usa su puño para mostrarle el poder de cinco ejércitos operando como uno solo.

Ah y toma la lección, no seas como Cersei ;-)

 Cuéntanos ¿Cuáles lecciones de liderazgo agregarías a la lista?

Este artículo fue publicado originalmente en Nayma Consultores