Hoy nos metemos de lleno en el Chai Masala, una manera (de hecho receta) de disfrutar del té muy típica de la India, así como en otros países de la zona. De hecho “Chai” significa “Té” en indio, y “Masala” se traduciría como “Mezcla de especias”. Así pues, hoy tocan una serie de sabores muy diferentes de a los que estábamos acostumbrados en nuestro Tea Time.
Disfrutamos de tres tipos diferentes de té Chai, cada uno con una base de té o infusión diferentes. En el caso de hoy hablamos de Sencha Chai (té chai negro), Shanghai Chai (té chai verde) y Rooibos Chai. Estas tres variedades de chai té mantienen algunos ingredientes en común, como puede ser la pimienta, aunque tienen sus particularidades. Haciendo click sobre el nombre de cada té podrás ver los ingredientes en concreto de cada variedad.
Vamos a ir describiéndolos a la vez, a fin de que puedas hacerte una idea en conjunto para poder comparar y diferenciarlos. Por eso nos vamos a referir a ellos como Chai verde, Chai negro o Chai Rooibos.
Empezamos por el aroma inicial sin haberlo infusionado, la primera impresión al olfato. Totalmente especiado en el caso del Chai Rooibos, que es una infusión muy influenciable a la hora de aromatizarla, dado que su aroma natural no tiene tanta presencia como en el caso del té verde o té negro. Un aroma fuerte en el caso del té Chai verde, en este caso al especiado típico se le añade un toque floral. Eso sí, el aroma más denso de los tres lo encontramos en el Sencha negro. En este caso en concreto nos viene un aroma más dulce, en el que sobresale el cacao junto con las especias.
Preparamos las respectivas infusiones, respetando los tiempos en base al ingrediente principal (té verde, té negro o Rooibos). Los tres tienen un color parecido, de tonos rojizos más bien oscuros. El hecho que haya ingredientes comunes en las tres recetas contribuye a este hecho. Llegados a este punto el aroma especiado inunda la habitación, señal que estamos en medio del “Chai Time”.
Llegados a la hora de la verdad, cada uno tiene su propio carácter. En lo que sabor se refiere, el que más recuerda a la receta original es sin duda el Chai Rooibos. Es el que deja más sabor a especiado de los tres. El té Chai negro es el más suave, balanceado por el anís estrellado y el cacao. Estos ingredientes hacen que sea también el más agradable de los tres. Y el que tiene el sabor más fuerte es el té Chai verde. Es también el que deja el regusto más persistente. En esto contribuye también el hinojo que incluye en su receta.
Estamos ante una comparativa, no una competición. A esto hay que añadirle la opinión personal de cada uno. Para una primera iniciación el Chai negro es una buena opción, al ser más suave y estar mejor balanceado. Para aquellos que ya esté iniciados, la receta de Chai Rooibos no les decepcionará, y menos si se prepara con leche de soja. Y el Chai verde para aquellos que les gusten los sabores más fuertes.
En definitiva, el Chai Masala es algo muy diferente con un sabor y aroma muy marcado a especias. Muy recomendable cuando hace frio y para prevenir resfriados, y que se puede tomar con agua o con leche.
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