¿Organizarían un shower de matrimonio?

Las celebraciones nupciales traen consigo una serie de tradiciones y eventos perfectos para compartir con familiares y amigos, la alegría que trae esta importante decisión. Además de reunirse a participar a sus allegados sobre la boda y contarles los por menores de la entrega del anillo de compromiso en oro blanco, invitar a sus amistades o familiares más cercanas a la elección del vestido de novia y el traje de novio, recibiendo de ellos consejos de lo que mejor les queda en términos de maquillaje, peinados de novia para ti, y el corte de pelo para tu futuro esposo. Aprovechar la prueba del banquete para hacer una cena con los padres de ambos, el shower es una oportunidad única para compartir un rato tranquilo y libre de estrés en medio de las carreras del evento, recibir regalos preboda y tener una velada divertida junto a las personas más cercanas a la pareja. Sigan leyendo y encuentren consejos, sugerencias y tips para organizar un shower fabuloso que sirva como abrebocas del gran día.

¿Qué es y quién lo organiza?

El shower es una celebración previa a la boda que se ofrece a la pareja con el fin de compartir un momento más íntimo y cercano, en el que algunos de los invitados puedan conocerse y ofrecer regalos para dotar el hogar de los futuros esposos. Es una reunión informal en la que participan familiares y amigos de ambos novios y en la que pueden comentarse algunos detalles de boda, hacer actividades y juegos, compartir pasabocas, discutir sobre el vestido elegante de fiesta que lucirán el día del matrimonio y por supuesto abrir los presentes que han llevado a los novios. Por lo general, el shower es organizado por la mamá, las tías, las hermanas o amigas cercanas de la novia, encargándose de la lista de invitados, la decoración y la comida.

En casa o por fuera

Lo más común es que los showers se celebren en la casa de alguna de las familiares o amigas de la pareja, lo que permite decorar a su antojo y realizar actividades chistosas y juegos, pero también pueden planear una reunión más sobria en un restaurante o café, que les permita llevar algunos elementos para crear un ambiente acogedor y personalizado. Comúnmente se define un tema como shower de cocina o shower de bar, que permite a los invitados orientarse sobre el tipo de regalos que van a llevar y las preferencias de la pareja.

Aunque no existe un código de vestuario para este tipo de eventos pueden ponerse de acuerdo para ir luciendo vestidos para cóctel de día o definir un estilo creando un shower temático como hawaiano, playero o típico. Seguro que conseguirán fotos muy divertidas y crearán un recuerdo único. Esta línea sirve igualmente para la decoración del lugar decidiéndose por colores vivos, bombas y letreros alusivos al matrimonio. Es importante comunicar a los invitados, que son en general los familiares y amigos más allegados a la pareja, el tipo de shower al que van a asistir. La recomendación es enviar una invitación digital, puede ser imitando los colores del diseño de tarjeta de invitación de la boda o contarle a los invitados de manera personal por medio de una llamada.

Pasabocas y bebidas

Por tratarse de una reunión informal, no se planea un almuerzo o cena como tal sino que se ofrecen una serie de pasabocas de sal y de dulce al estilo buffet, permitiendo que cada invitado pique a su gusto. La mesa puede decorarse con frases de novios recordando la historia de la pareja o nombrando cada platillo con nombre románticos como “amor dulce” o “galletas hechas con amor”. Para complementar se ofrece bebidas sin alcohol como jugos o gaseosas y una copa de vino.

Para animar el shower

Teniendo en cuenta su espíritu y el de su familia, en el shower pueden hacerse una serie de actividades como un brindis, una caja de deseos que contenga frase de amor cortas que cada invitado les dedique. Hacer un concurso de preguntas de quién los conoce más o hacer que los hombres diseñen con papel o tela un vestido para la novia y las mujeres uno para el novio.

El shower es un momento único y perfecto para anticipar el ambiente festivo y romántico de la boda. Puede aprovecharse para intimar lazos entre los invitados, compartir ideas sobre los vestidos de fiesta que van a lucir ese día siguiendo el código de vestuario incluido en las tarjetas de matrimonio y hacer que los novios se sientan acompañados y muy queridos durante toda la celebración. Y ustedes ¿se animarían a hacer uno?