Andina

Carne de cuy: alimento que previene el cáncer por su formidable aporte nutricional

Contiene más proteína que otras carnes, aminoácidos y ácidos grasos esenciales para una alimentación saludable

La carne de cuy contiene más proteína que otras carnes, aminoácidos y ácidos grasos esenciales para una alimentación saludable. ANDINA/archivo

La carne de cuy contiene más proteína que otras carnes, aminoácidos y ácidos grasos esenciales para una alimentación saludable. ANDINA/archivo

03:30 | Lima, ago. 26.

La gastronomía andina peruana tiene en la carne de cuy a uno de sus insumos estrella por su excelente sabor, versatilidad y calidad nutricional. Sobre este último aspecto, se caracteriza por contener alto nivel proteico, baja concentración de grasa, colesterol de buena calidad, así como minerales y vitaminas que lo convierten en un superalimento que, según investigaciones, ayuda a prevenir el cáncer y la anemia, entre otras enfermedades.


A continuación, todas las bondades nutricionales de este alimento ancestral andino del cual el Perú es el principal productor a escala mundial y líder en la comunidad andina en materia de producción de cuyes y mejoramiento genético..


Alto valor nutritivo


La carne de cuy tiene un alto valor nutritivo, debido a que contiene los aminoácidos esenciales y ácidos grasos esenciales requeridos en la nutrición humana. Según el Centro Nacional de Alimentación y Nutrición del Instituto Nacional de Salud (INS), la carne de cuy contiene 78.1% de agua; 19% de proteína; 1.6% de grasa; 1.2% de minerales y 0.1% de carbohidratos totales y disponibles. 


Entre los minerales más importantes están el calcio (29 miligramos), fósforo (29 mg), zinc (1.57 mg) y hierro (1.9 mg).  Asimismo, posee vitaminas como la Tiamina (0.06 mg), Riboflavina (0.14 mg) y la Niacina (6.50 mg); mientras que aporta una energía que alcanza las 96 kilocalorías (Kcal).


Otros estudios


Por su parte, el estudio “Evaluación cualitativa de la carne de cuy-Análisis bromatológico”, elaborado por el Instituto Nacional de Investigación Agraria (INIA), realizó el análisis de la composición química de la carne y la piel de cuy, así como análisis de aminoácidos en carne y piel de cuy, grasa muscular, colesterol y minerales.


El estudio reveló que la carne de cuy está conformada en promedio por 74.64% de humedad, 19.49% de proteína, 3.67% de grasa, y 1.14% de minerales. Asimismo, la piel de cuy contiene 60.21 % de humedad, 32.2% de proteína, 8.1% de grasa, y 0.4% de minerales. La piel de cuyes jóvenes tiene 2.64% más proteínas que la de los adultos. 


Más proteína y ácidos grasos que otras carnes


El contenido promedio de proteína en la carne de cuy (19.49 %) es superior al de la carne de porcino (14.1%) y al del bovino (18.8 %). 


La carne de cuy tiene alta digestibilidad, así como bajo nivel de colesterol y triglicéridos, alta presencia de ácidos grasos como el linoleico y linolénico, que son esenciales para el ser humano. 


La existencia de estos ácidos grasos es muy baja o casi inexistentes en otras carnes, y estos son precursores de la conformación del ácido graso araquidónico (AA) y ácido graso docosahexaenoico (DHA). Ambas sustancias son vitales para el desarrollo de las neuronas y las membranas celulares.

Previene el cáncer y combate la anemia


A los ya mencionados beneficios para el organismo como parte de una dieta saludable, rica en vitaminas y minerales, se suma ahora el aporte de la carne de cuy en la prevención y tratamiento del cáncer.


Nery Quispe, profesora de Nutrición de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), reveló que la carne de cuy contiene una enzima conocida como asparaginasa, que es un protector frente al cáncer, dado que ayuda a reducir la angiogénesis o proliferación de células tumorales.


Asimismo, recomendó a las personas que padecen cáncer y siguen tratamientos de quimioterapia, en vista que las bondades nutritivas de este alimento ayudan a contrarrestar las consecuencias negativas de este tratamiento oncológico en el organismo.


La especialista sostuvo que la carne de cuy ayuda también a la disminución de la anemia y desnutrición crónica infantil. “Su producción y consumo debería ser incentivado en toda la población, pero, sobre todo, en las regiones más pobres”, anotó la investigadora.


En ese sentido, recomendó que para aprovechar el potencial de la carne de cuy es ideal consumirla en preparaciones como guisos, al horno o adobo.  Lo contrario ocurre en la preparación a la parrilla, dado que se pierde hasta en 30% el grado de absorción de sustancias positivas, mientras que si se consume frito se pierde hasta el 60%.


Nery Quispe agregó que otra alternativa nutritiva es consumir la sangrecita de cuy, dado que es una excelente fuente de hierro para prevenir la anemia infantil.

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(FIN) LZD/MAO
JRA

Publicado: 26/8/2020