6.4: UTILIZACIÓN DEL COLOR

La semiología o la semiótica es la ciencia que se encarga del estudio del significado de los signos. El color, como componente de los símbolos gráficos, lleva asociados significados que deben conocerse. Estudiemos cada una de las componentes del color por separado.

El Tono: La imagen que se nos viene a la cabeza cuando decimos "mapa" es la de una imagen coloreada. Es difícil sustraerse a la costumbre de representar las cosas con un determinado color.

Estamos definiendo las características del mapa en términos de TONO (verde, azul, siena,...) y asociamos a cada tono una característica distinta del mapa (aguas, curvas, precipitaciones). Cada vez que haya algo azul en el mapa sabremos que es agua (no importa si es dulce o salada, potable o indigesta, navegable o canalizada) lo cual ya es una gran información pues permite sin mucho esfuerzo, de un golpe de vista, aislar esta característica del resto de la información. La variable visual tono tiene la propiedad selectiva y por eso la utilizamos para identificar diferencias cualitativas en el mapa.

Debe tenderse a agrupar la simbología en clasificaciones cualitativas por medio del tono, sin que el valor esté presente.

El Valor: Una vez clasificadas las características cualitativas del mapa por medio de los tonos, pueden apreciarse características cuantitativas en cada una de las clases. El valor es la componente cromática que ordena la información dentro de cada clase.

En los mapas de precipitaciones, por ejemplo, se ordenan las isozonas por medio de variaciones del valor. El tono con un valor menor se aplicará a las zonas con menos precipitación, y reservaremos los valores más altos para las zonas con precipitaciones bíblicas). Cuanto mayor sea el fenómeno más alto será el valor aplicado.

 

Un mismo fenómeno debe ser representado por variaciones de valor sin que intervenga la variación de tono. En el caso de que el número de zonas a rellenar sea mayor que el número de valores disponibles de un tono no tendremos más remedio que ir a la vez modificando éste.

Es inadecuado utilizar gamas de más de 6-8 diferentes valores de un tono. Un error está en aplicar más de 6 valores diferentes a una superficie NO definida por isolíneas. Como se verá más adelante, sólo en el caso de que la característica que se vaya a representar esté definida por isolíneas y por tanto, en los que cada isozona está en contacto con la isozona vecina, podrá ampliarse el número de valores del tono.

   

La Saturación: La aplicación de la variación de saturación en cartografía no está suficientemente extendida. No se utiliza de forma aislada como variable visual, sino que actúa conjuntamente con el valor y el tono, potenciando las diferencias entre colores.

Los tonos totalmente saturados proporcionan imágenes muy luminosas y alegres (gozan de la propiedad selectiva en mayor grado que los poco saturados) y los tonos poco saturados son más elegantes, serios y capaces de ofrecer armonías de color más sofisticadas que los totalmente saturados.

   

Informáticamente podemos conocer la saturación de los colores y descubrir que los colores que dispongan de un 100 o de 0 en una de sus componentes (RGB o CMA) son colores totalmente saturados (columna de la izquierda):

Color rojo puro (100,100,0), color magenta puro (0,100,0), color verde primavera (90,0,95), color verde claro (80,0,70) y color naranja clarito (25,15,0).

Colores parcialmente saturados (columna de la derecha):

Color burdeos (78,93,47) Sat.=78 %, color amoratado (30,50,40) Sat.=25%, color verde oliva (80,50,70) Sat.=43%, color verde botella (60,30,60) Sat.=33% y color salmón (70,50,10) Sat.=75%.