En el mes de octubre, Fórmulas en la historia contó con la participación de Guillermo Sierra Araujo, profesor de historia en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH), quien impartió “Las grafías antiguas y su relación con el estudio de la historia”, donde señaló que la paleografía debe ser entendida como la disciplina que estudia las escrituras antiguas, y con la cual se desentrañan no sólo la escritura ajena a nuestro tiempo sino que nos hace asequible el conocimiento para saber cómo se vivía en otra época.

/cms/uploads/image/file/213938/IMG_4602.JPG

En palabras del profesor Sierra la paleografía de documentos –en esta ocasión, de los manuscritos novohispanos de índole administrativa, jurídica, política y religiosa–, permiten al investigador de la historia adentrarse y dilucidar ciertas prácticas sociales y culturales de la época virreinal, en otras palabras, al leer lo escrito en el pasado se genera conocimiento que se transforma en ventanas que permiten ver otros periodos y comprender y transformar nuestro presente. Asimismo, reiteró que al plantear la historia y la paleografía para interactuar en el presente y el pasado, se despierta en los estudiantes el interés por conocer cómo se vivió cierto proceso histórico y, sobre todo, descubrir por qué se vive actualmente de determinada manera, puesto que, mediante la historia se intenta explicar el presente.

La clase se sustentó en varios volúmenes originales del fondo documental de la época colonial al resguardo del AGN, algunos de ellos fueron:

  • Inquisición, volumen 1505, 1ª parte, expediente 3 (todo el expediente).
  • Hospital de Jesús, volumen 236, legajo 123 (1), expediente 22, foja s/n.
  • Tierras, volumen 1687, expediente 2, foja 81.

/cms/uploads/image/file/213939/IMG_4611.JPG

Para hacer comprensible su contenido, refirió Guillermo Sierra, se deben formular una serie de preguntas: ¿Cuándo y dónde se escribió el documento? ¿Quién lo escribió? ¿Por qué se escribió? ¿Para qué se escribió? ¿Cuál es el discurso? Al contestar esas interrogantes –manifestó– se tiene un acercamiento inicial al corpus documental y una primera interpretación.

/cms/uploads/image/file/213942/IMG_4645.JPG

Para finalizar la clase el profesor comentó que la paleografía debe ser aplicada de manera interdisciplinaria; así, junto con la historia, la antropología, la sociología, la etnología, se tendrá un panorama completo de lo que acaeció en el periodo que se desea comprender.

/cms/uploads/image/file/213946/IMG_4709.JPG

Una de las asistentes, la investigadora independiente, Sandra Pérez Velasco, señaló que la clase fue muy significativa, ya que pocas veces se abordan estos temas, además, enfatizó, enseñar historia con fuentes primarias es una “estrategia muy interesante para formar de manera integral a los estudiantes en cuestiones de paleografía, ya que actualmente la mayoría de las universidades carecen de un plan de estudios donde se incluya la paleografía como materia obligatoria”.

/cms/uploads/image/file/213940/IMG_4618.JPG