Cómo puedes aumentar el conteo de espermatozoides
Actualizado: 5 de mayo de 2023
Si se determina la causa que provoca la baja calidad del esperma y es posible tratarla, por ejemplo en el caso del varicocele, esto podría resolver el problema. Sin embargo, y según advierte el Dr. Moisés de la Casa, responsable de andrología de la Clínica Ginefiv, en la mayoría de los pacientes no es posible identificar una causa concreta, y la escasez de espermatozoides casi siempre se debe a la suma de diversos factores.
En determinados casos sí se hacen recomendaciones al paciente, y el especialista en andrología pone como ejemplo que si el varón presenta una fragmentación de la cadena de ADN espermático –que es uno de los factores que afectan a la calidad del semen– se le indica que evite tomar excitantes como el café, el té, o las bebidas energéticas porque afectan al ADN del semen.
En otras ocasiones, continúa, se les administran a los pacientes complejos vitamínicos durante dos o tres meses –que es el tiempo que tarda en formarse un espermatozoide– para intentar averiguar si el problema se debe a un déficit de vitaminas y comprobar si mejora algo la calidad, ya que incluso aunque no se obtengan los resultados esperados, se trata de pautas que tampoco les van a perjudicar.
Consejos para prevenir o aumentar un bajo conteo de espermatozoides
Revertir el bajo conteo de espermatozoides parece complicado, pero durante las últimas décadas los investigadores han comprobado que la calidad del esperma y las tasas de fertilidad han descendido en la mayoría de los países occidentales; de hecho, un estudio publicado en 2017 en Human reproduction update reveló que el promedio de conteo de esperma en Australia, América del Norte, Europa y Nueva Zelanda se había reducido un 59,3%. Eso significa que existen factores que están influyendo para que el esperma tenga cada vez peor calidad.
Aunque los científicos todavía no conocen cuáles son exactamente esos factores, algunas investigaciones han descubierto que ciertos hábitos pueden prevenir esa pérdida de calidad seminal o contribuir a recuperarla. Te contamos qué debes hacer para mejorar tu semen y aumentar así tu fertilidad:
Controlar el peso y hacer ejercicio
La pérdida de peso y la práctica de ejercicio en individuos con sobrepeso u obesidad pueden mejorar o incrementar el conteo espermático, y un estudio publicado en Nutrición hospitalaria reveló que un programa de 16 semanas de ejercicio aeróbico moderado, en sesiones de al menos 50 minutos, tres veces por semana, incrementaba el volumen y la concentración de esperma en 45 hombres obesos sedentarios.
Reducir los niveles de estrés
El estrés continuado obliga al organismo a mantenerse a la defensiva, por lo que se centra más en superar las adversidades y menos en reproducirse. Aprender a enfrentarnos a las situaciones estresantes ayuda a reducir sus efectos negativos.
Dejar de fumar
El consumo de tabaco reduce significativamente la calidad seminal, según los resultados de una revisión de 20 estudios realizada en 2016 y publicada en Science Direct, y en la que participaron 5.865 varones.
Evitar el alcohol y otras drogas
Aunque no hay muchos estudios que hayan analizado la relación entre la salud espermática y el consumo de drogas, algunos investigadores han asociado el uso de drogas como el alcohol, la marihuana y la cocaína con la decreciente producción de esperma.
No abusar de ciertos medicamentos
Algunos fármacos pueden afectar a la calidad del semen, aunque este puede normalizarse tras dejar de tomarlos; este es el caso de algunos antibióticos, antiinflamatorios, antipsicóticos, esteroides anabolizantes, corticosteroides, etcétera.
Tomar suplementos de fenogreco
El fenogreco se ha utilizado como un remedio natural para mejorar la salud del esperma, y un estudio publicado en 2017 en Functional Foods in Health & Disease, concluye que Furosap®, un complemento alimenticio elaborado con extractos de esta planta, mejora significativamente los niveles de testosterona y el perfil espermático.
Mantener unos niveles adecuados de calcio y vitamina D
El calcio y la vitamina D parecen tener una cierta influencia sobre la salud del esperma, ya que algunos estudios, como el publicado en Human reproduction, han mostrado que bajos niveles de ambos micronutrientes se asocian con un conteo de esperma más bajo, aunque no se conocen las causas de dicha asociación.
Tomar ashwagandha
Esta planta, conocida también como el ginseng indio, se ha empleado en la medicina tradicional ayurvédica como un remedio natural para tratar diversas formas de disfunción sexual. Y una investigación, publicada en Evidence-Based Complementary and Alternative Medicine, mostró que la ingesta de 675 mg de ashwagandha a diario durante 90 días provocó un 167% de aumento en el conteo de esperma en los 47 hombres que participaron en el estudio, y que al inicio del mismo presentaban un bajo conteo.
Aumentar la cantidad de alimentos ricos en antioxidantes en la dieta diaria
Los antioxidantes (como el selenio, las vitaminas C y E, la coenzima Q10 o el glutatión) ayudan a eliminar y desactivar los radicales libres y otras sustancias que dañan las células, y numerosos estudios han asociado su consumo con un incremento del conteo de esperma.
Reducir el consumo de grasas no saludables
Según los resultados de un trabajo publicado en 2014 en Human reproduction, y en el que participaron 209 hombres españoles con buena salud y edades comprendidas entre los 18 y los 23 años, su conteo de esperma se redujo cuando incrementaron su consumo de grasas trans.
Eliminar o limitar la exposición a toxinas y contaminantes ocupacionales o ambientales
La contaminación atmosférica y la exposición a productos químicos tóxicos se han relacionado frecuentemente con una disminución de la calidad y el conteo total de esperma.
Limitar el consumo de soja y otros alimentos con fitoestrógenos
Se ha observado que algunos alimentos que contienen fitoestrógenos reducen la adhesión de la testosterona y la producción de esperma.
Tomar suficiente folato y cinc
Algunos estudios han mostrado que el consumo combinado de cinc y ácido fólico aumenta la calidad espermática, incluyendo la concentración y el conteo total de espermatozoides.
Creado: 30 de enero de 2019
