Un Lugar para comenzar, El Atrio y la Puerta (El Tabernáculo, II Parte)

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La puerta del atrio.

“Y para la puerta del atrio habrá una cortina de veinte codos, de azul, púrpura y carmesí, y lino torcido, de obra de recamador; sus columnas cuatro, con sus cuatro basas.” Éxodo 27:16

En Palestina un aprisco es un recinto rodeado de cuatro paredes en un lugar abierto, con un pequeño cuarto donde las ovejas pueden refugiarse en mal tiempo. Debido a que esto está construido en lugares públicos, hay sólo una entrada. El pastor mismo se convierte en la puerta ya sea parándose o acostándose en la abertura…

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Este es un aprisco, donde el Pastor se convierte en la puerta.

El Tabernáculo del Antiguo Testamento era una estructura similar, una tienda rectangular alrededor de la cual había un recinto grande que se llamaba “Atrio”. Había sólo una entrada al atrio, llamada la Puerta. Solo hay una entrada, su nombre es Jesucristo. El es la única puerta por la que el hombre obtiene salvación, redención de sus pecados. Por eso Jesús dijo: “De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas.” Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; y entrará, y saldrá, y hallará pastos.”Juan 10:7-9. El también se convierte en nuestro pastor, nosotros ovejas de su rebaño. El tiene cuidado de nosotros y nos apaciente en pastos verdes (Salmo 23).

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Este es el atrio.

LA PUERTA:
Dimensiones: 20 codos de ancho por 5 codos de alto (1 codo = 50 cm). Total de la puerta: 100 codos. Esto nos habla de que en Jesús hayamos completa salvación, 100%, permitiéndonos vivir vidas santas y preparándonos para vivir desde ahora vidas abundantes con El desde ahora hasta la eternidad.

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La estructura de la puerta estaba formada por cuatro columnas. Así como cuatro son los evangelios que hay en el Nuevo Testamento que nos hablan de la vida de Jesús en este mundo y nos lo muestran como el único camino de salvación.

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La abertura de la puerta estaba cubierta por una cortina de 20 codos de ancho y sus colores eran: púrpura, carmesí y azul. Cada color tiene un simbolismo:

o Azul (Ex. 24:10; Ezequiel 1:26; 1 Cor. 15:47) El Trono del Señor, autoridad celestial.

o Púrpura (Marcos 15:17-18); Apoc. 19:16; Jueces 8:26) Vestidura de los reyes. Realeza de Dios.

o Carmesí o Escarlata (Apoc. 5:9-10; Isa 63:1-3; Heb. 9:19) Su majestad, poderío, señorío. La sangre de Cristo derramada.

o Lino blanco: (1 Pedro 1:19; Salmo 51:7; Isa. 1:18; Daniel 7:9; Marcos 9:3; Apoc. 3:5; 19:8) Pureza, limpieza total, santidad.

Aplicación personal:

Estos colores son nombrados en el libro de Éxodo en esta misma combinación y orden más o menos 28 veces, indicando su importancia. La aplicación de estos colores nos habla que al entrar por la puerta que es Jesucristo, iniciamos un camino muy diferente al que estábamos acostumbrados en el mundo. Nuestra vida tiene un cambio absoluto y ahora donde reinaba el pecado, reina la santidad de Dios (lino blanco). Estamos siendo gobernados ya no por este mundo sino por la majestad, el poderío de nuestro Dios (Carmesí, púrpura) y tenemos autoridad en El (azul).
Continua…

Referencias:

El Tabernáculo, Morada de Dios con su Pueblo. Agnes Lawless

Maritza Cartín Estrada, Comunidad Gosén, C.R.

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