La
soya, ¿alimento del futuro o de hoy?
Alicia Bello Quintos
¿Has escuchado hablar de la soya o la has probado? La soya
es de origen asiático, es un grano que forma parte del
grupo de las leguminosas como el frijol o las habas, pero debido
a su alto contenido de aceite, también pertenece al grupo
de las oleaginosas como el cacahuate y la aceituna.
Tradicionalmente, en América, el grano de soya se utilizó
únicamente para extraer un aceite comestible de muy buena
calidad, cuyo sobrante era una pasta desgrasada que sólo
se utilizaba como forraje, para alimentar al ganado y las aves
de corral.
Fue tiempo después que se comenzó a investigar las
propiedades de la fibra de soya y de los beneficios de su consumo
en la salud de las personas, en comparación con otros alimentos
que además de proporcionar los nutrientes de la soya, también
tienen repercusiones secundarias como la carne, que puede incrementar
en grandes cantidades el ácido úrico o el colesterol,
provocando algunos padecimientos.
La soya, que puede ser un excelente sustituto de la carne, contiene:
En diversos estudios, se ha comprobado que el incluir la soya
o sus derivados en la dieta alimenticia, tiene también
los siguientes beneficios:
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Reduce el colesterol en la sangre.
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Disminuye los riesgos en problemas cardiacos.
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Ayuda
en el combate a la osteoporosis porque el calcio que contiene
fortalece los huesos.
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Proporciona
mayor energía en el cuerpo, por la cantidad de carbohidratos
y grasas que actúan como combustible en el organismo.
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Ayuda
en el crecimiento.
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Repara
el organismo cuando sufre algunos daños, como es el
caso de los riñones.
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Alivia
algunas molestias femeninas como los dolores durante la menstruación,
algunos síntomas de la menopausia y regula los periodos
menstruales.
Pero, ¿cómo preparar la soya?
La ventaja de la soya, además de su bajo precio y de que
en poca cantidad rinde para varias personas, es la gran variedad
de sencillos y deliciosos platillos que con ella se pueden preparar.
Por ejemplo, ¿se imagina unas ricas tostadas de tinga,
unos tacos dorados o al pastor o de soya enchilada, unas albóndigas,
picadillo o chiles rellenos? Sólo necesita imaginación
y algunas verduras, condimentos o picante para deleitarse con
un alimento barato y altamente nutritivo. |