El viticultor




Quiero empezar hoy aclarando algunos términos. ¿Quién es el viticultor? ¿Qué hace? Ya no habrá más dudas al respecto. El viticultor es la persona que se dedica a la viticultura (es decir, al cultivo de la vid), y el vinicultor es el que se dedica a la vinicultura (es decir, a la elaboración de vinos). Por tanto, se llama vitivinicultor a la persona que se dedica a la vitivinicultura (es decir ambas actividades).

Hoy me quiero centrar en el trabajo del viticultor por lo importante que es para la posterior elaboración del vino por parte del vinicultor. A lo largo del año el viticultor se encarga de labores como lo son la plantación. También se encarga de la poda de las vides, el doblado, la ligadura, el cultivo del suelo, el abono, la eliminación del follaje, la protección de las plantas contra los parásitos y las posibles enfermedades y la cosecha.

Obviamente esta profesión ha evolucionado mucho, aunque se mantienen varias de las técnicas del pasado. Algunas de las grandes mejoras se deben a la introducción de la mecanización en la viticultura con lo que se redujo el trabajo a menos de la mitad. La llegada de los tractores supuso toda una revolución para la labranza, el fresado, la escarificación, la fertilización, el segado y el sulfatado.

Antiguamente se usaban sulfatados masivos, que hoy se han reemplazado con medios ecológicos, con aparatos capaces de dosificar con mayor precisión y con las trampas para insectos más evolucionadas ya que en algunos casos usan feromonas.

Sin embargo, para la producción de vino de la mas alta calidad se ve una fuerte vuelta hacia prácticas de agricultura tradicionales: Labranza a caballo (cuando es posible) y eliminar los químicos en los viñedos.

El antiguo viticultor se ha profesionalizado mucho a lo largo de los años convirtiéndose en un profesional “multiusos”. A pesar de todos estos cambios su profesión sigue siendo una actividad tradicional con contacto constante con la naturaleza, que le exige conocimientos geológicos y climatológicos,  sobre el crecimiento de las plantas y la elaboración del vino. Aunque el trabajo manual haya disminuido, el viticultor y la viticultora (pues cada vez hay más mujeres) siguen necesitando su «buena mano». La próxima vez que tome una copa de vino le invito a que haga un brindis por el viticultor como un pequeño homenaje a su trabajo.

*Gerente Viña De Martino Wine MBA Bordeaux Management School.

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