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Templo de Jerusalén

De la Enciclopedia Libre Universal en Español
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Maqueta del segundo templo de Jerusalén

El Templo de Jerusalén o el Templo Santo (hebreo: בית המקדש, Bet HaMikdash, "La Santa Casa"),se refiere a una serie de estructuras ubicadas en el Monte del Templo (Har HaBayit) en la ciudad vieja de Jerusalén. Históricamente, los dos templos se construyeron en este lugar con las propias características en la escatología judía. Según la Biblia hebrea, el Primer Templo fue construido por el rey Salomón (c. 970 adC- c. 930 adC). Este es el centro del antiguo judaísmo de acuerdo a las Escrituras hebreas. Este Primer Templo fue destruido por los babilonios en 587 adC cuando se conquisto a la ciudad.La Construcción de un nuevo templo se inició en el 537 adC, después de una pausa, se reanudaron los trabajos en el 520 adC. Cinco siglos después, este segundo templo, también conocido como el Templo de Herodes, fue renovado por Herodes I el Grande alrededor del 20 adC. Posteriormente fue destruido por los romanos en el año 70.

Un santuario Islamico fue construido en el sitio del templo en el siglo VII.

El Primer Templo

La construcción del Templo comenzó durante el cuarto año del gobierno de Salomón. Se tardó en construirlo aproximadamente 7 años, lo que implica que debió de terminarse en el año 961 adC. El Templo propiamente dicho debió ser un edificio largo y bastante estrecho, orientado sobre un eje longitudinal en dirección Este-Oeste. El edificio debió tener una longitud de aproximadamente 30 metros, 9 metros de ancho y una altura de casi 3 metros. En la fachada oriental se construyó una escalera, junto a la puerta de la entrada. A ambos lados de ésta se erigieron dos columnas, llamadas Jaquim y Boaz, la primera a mano derecha de la entrada y la segunda a su izquierda. Los sacerdotes y el rey entraban en el Templo a través de una gran puerta chapada de oro, de aproximadamente 10 metros de alto y 4 de ancho. Trás de esa puerta se encontraba el vestíbulo de entrada, el «Ulam». Después de este vestíbulo, se encontraba la estancia principal, el «Hekal» o Santo, iluminado a través de unas ventanas altas. Después de la muerte de Salomón, el templo sufrió profanaciones no sólo con las invasiones sino con la introducción de deidades siro-fenicias en ciertos periodos y sólo se restauró en varias ocasiones como en los reinados de Ezequías y Josías. Finalmente fue destruido por el rey babilónico Nabucodonosor II en 587 adC, quien además llevó cautiva a una gran parte de los habitantes del Reino de Judá hacia tierras caldeas.


El Segundo Templo

Al ser liberados del cautiverio en Babilonia, en 517 adC, los persas autorizaron a los judíos a reconstruir el templo. Alrededor del 19 adC, Herodes el Grande comenzó una masiva renovación y expansión del templo. Éste fue demolido y se construyó uno nuevo en su lugar. La nueva estructura es referido algunas veces como el Templo de Herodes, pero también se le sigue llamando Segundo Templo ya que los rituales de sacrificios continuaban sin disminución durante todo el proceso de construcción. En el 66 dC, la población judía se rebeló en contra del Imperio Romano. Cuatro años después, el 70 dC, las legiones romanas bajo las órdenes de Tito reconquistaron y luego destruyeron la mayor parte de Jerusalén y el Segundo Templo. El arco de Tito, localizado en Roma fue construido para conmemorar la victoria de Tito en Judea representa los soldados romanos llevándose el Menorah del templo. Jerusalén fue arrasada por el Emperador Adriano nuevamente en 135 dC.

El Islam en el Templo

Jerusalén no es tan sólo un santuario de cristianos y judíos; los musulmanes la veneran, después de La Meca y Medina, como Ciudad Santa del Islam, pues según la tradición islámica, Mahoma subió al cielo sobre la yegua alada Burak desde Jerusalén en una 'travesía nocturna' considerada como un sueño o una visión, aunque no deja de ser una interpretación puesto que en la Sura 17 del Corán, donde encontramos la historia, no figura el nombre de ninguna ciudad. Esto ocurrió en un venerado lugar, también considerado santo por los israelitas, el Haram-ach-Charif, sobre la colina de Moriá.

En la actualidad

Del Segundo Templo solo queda el Muro Occidental (llamado también Muro de las Lamentaciones), el principal lugar sagrado del judaísmo. El control del Monte del Templo está en manos de autoridades religiosas islámicas, y el acceso al recinto coordinado con Israel, lo que incluye la prohibición de rezar para los no musulmanes. La construcción de un Tercer Templo es una meta de diversos grupos marginales del judaísmo y del cristianismo evangélico.

Referencias

Artículos relacionados

Bibliografía

  • Theodore A. Busink: El Templo de Salomón en Jerusalén de Herodes - un estudio arqueológico e histórico, teniendo en cuenta la , Vol 1,1970; vol. 2 el sufrimiento 1980ma
  • Wolfgang Zwickel: El Templo de Salomón (historia cultural del mundo antiguo 83), Mainz: von Zabern el 1999a ISBN 3-8053-2466-9

Notas