Cómo hacer una chilena en fútbol

Coescrito por Walter Merino

Recibes un centro cruzado perfecto y estás de espaldas al arco, mal posicionado y bien marcado. Desde Pelé hasta Wayne Rooney, muchos de los grandes futbolistas han frustrado a los porteros con una chilena oportuna con la que un pase brillante que llega a un mal lugar se redirige, lo que genera un gran tiro en el proceso. Puedes aprender lo básico de completar una chilena tú mismo, así como a practicar adecuadamente y buscar la oportunidad apropiada en un partido.

Parte 1

Parte 1 de 3:

Aprende lo básico

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Gira tu espalda hacia donde quieres que vaya el balón. Para hacer una chilena correctamente, básicamente necesitarás caer hacia atrás y patear el balón arriba, sobre tu cabeza, en dirección opuesta a la que mirabas. Se trata de una jugada inesperada y espectacular cuando se hace correctamente, pues estás frente a la dirección opuesta.
- La mayoría de las chilenas se dan dentro del área de penal tras recibir algún tipo de centro o pase en un intento de marcar un gol. Normalmente, no es algo que la mayoría de los jugadores traten de hacer, sino algo que es posible que necesites hacer en el momento. ^{[1]
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  Fuente de investigación}
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Impúlsate con el pie que usarás para patear. Para dar inicio al movimiento de la chilena clásica, levanta la rodilla del pie que no dominas e impúlsate del suelo con el pie con el que patearás. Mientras más alto puedas levantar el pie con el que no patearás, mejor, pues esto te ayudará a conseguir el impulso necesario para hacer que se levante el pie con el que patearás y que tires apropiadamente.
- Es posible que quieras patear con un pie o el otro, esto depende de la parte del campo en la que te encuentres y de qué tan cerca a la pelota estés; sin embargo, debes impulsarte con el mismo pie que quieres usar para patear.
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Inclina tu cabeza y hombros hacia atrás. Mientras levantas la pierna, lleva hacia atrás tu potencia, como si trataras de alejarte del balón, y déjate caer de nuevo al suelo. Sé cuidadoso: no tires tu cabeza hacia atrás demasiado rápido o inclines tu cuerpo hasta que dé una vuelta completa. Mantente enfocado en el tiro y en hacer contacto con la pelota sin caer demasiado rápido.
- Piensa en la escena de “Matrix” en la cual Neo trata de evadir un frenesí de balas al doblarse hacia atrás. Eso es lo que intentas hacer, pero más rápido.
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Levanta la pierna con la que patearás y mantenla recta. Mientras tu impulso te lleva hacia atrás, haz que tus piernas hagan un movimiento de “bicicleta”, lo que hace que el pie con el que no patearás se dirija hacia el suelo y la otra pierna, que usaste para impulsarte, hacia la pelota para hacer contacto.
- Esta rotación de los pies es a partir de donde la patada obtiene su nombre en inglés (“bicycle kick”), pues usas la pierna con la que no pateas para impulsarte y para que te dé poder para patear el balón hacia atrás.
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Golpea el balón. Si es posible, usa la rugosidad en la parte más dura de lo más alto de tu pie. Esto hace que la pelota pase directamente sobre tu cabeza y detrás de ti. Idealmente, debes buscar patear el balón en la parte superior y no en la inferior, pues esto puede hacer que la pelota se vaya hacia arriba.
- Es muy difícil hacer contacto limpio con la pelota durante una chilena, por eso esta se usa más comúnmente como una maniobra improvisada en el último minuto. Mantén tus ojos cerca del balón y trata de golpearlo como mejor puedas.
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Prepárate. Pon tus brazos hacia los costados para soportar tu caída y cae con tus brazos lo más abiertos posibles para alejar la presión de la caída de tu espalda y tu cadera. Ten cuidado de no girar hacia atrás demasiado rápido.
- Algunos jugadores prefieren recibir el golpe en un costado en vez de una caída llana. Practica algunas chilenas y hazte una idea de qué funciona mejor para ti y tu estilo de juego.
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Parte 2

Parte 2 de 3:

Practica con seguridad

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Obviamente, caer sobre tu espalda para patear el balón no deja de ser peligroso. Para reducir la probabilidad de herirte al caer sobre tu espalda, practica solamente en el césped, de modo que el impacto sea tan suave como sea posible. Caer sobre zonas de tierra o concreto es una buena manera de herirte. No se puede hacer una maniobra de fútbol en un espacio interior.
Si vas a practicar chilenas, asegúrate de amortiguar el golpe cuidadosamente. Practica al extender tus brazos hacia los costados para prepararte para el impacto de manera automática hasta que lo puedas hacer sin pensarlo.
Una chilena es una dulce cereza en el pastel de tus habilidades futbolísticas, pero no debe ser algo que practiques con regularidad. Usar un poco de tiempo al final del entrenamiento para practicar algunas chilenas es bueno; sin embargo, emplea más tiempo en trabajar tu juego de piernas, patear el balón y desarrollar el oficio del fútbol.
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Haz que alguien más te ceda el balón. Es difícil practicar chilenas solo, pues no son básicamente más que apuestas. Haz que un compañero te dé pases desde una variedad de direcciones y trata de practicar la obtención de un buen toque en la pelota sin tener que controlarla primero. Las patadas que redirigen el balón, como la chilena, son muy difíciles de lograr, lo que hace que practicarlas valga la pena tanto para jugadores intermedios como avanzados que busquen mejorar su juego.
- Si no tienes a nadie con quien practicar, trata de hacer rebotar el balón en una superficie dura de manera que regrese en dirección a ti o incluye esto en una rutina de dominadas.
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Parte 3

Parte 3 de 3:

Usa una chilena durante un juego

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Busca primero el pase. Si bien las chilenas son espectaculares, tienen poca probabilidad de ocurrir. Pateas el balón sin ver, lo que hace más probable que falles el tiro, le cometas una falta a un defensor o ni siquiera le des al balón. Cuando estés en el área y a espaldas del gol, busca primero a un compañero sin marca.^{[2]
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- Si todos tienen una marca, considera bajar el balón a tus pies primero y evadir a los defensores o tratar de rematar el balón más limpiamente. Cambiar un poco la dirección en él mediante una chilena puede estar bien, pero un remate que parta del suelo será más potente.
La mayoría de las chilenas se hacen en el área de penal cuando tu equipo tiene el balón y trata de anotar un gol. Cada vez que estés en territorio rival y trates de llegar a una posición para anotar un gol, revisa dos veces y asegúrate de que haya al menos un defensa entre tu posición y el arco.
Si estás en una buena posición para tratar de hacer una chilena, asegúrate de que no se interpongan unos defensores molestos mientras la haces. Dado que una chilena implica poner en el aire tus pies equipados con botines de fútbol con tacos, es más probable que patees a otro jugador y seas amonestado. Ten cuidado, evita ser amonestado por una patada alta.
Si vas a jalar el gatillo, asegúrate de estar detrás de la pelota sin obstáculos. Redirigir la pelota con un pequeño golpe sería mejor si pudieras hacerlo con un poco más de precisión al controlar el balón primero y, de hecho, mirar hacia el arco. La chilena se trata de sorpresa y fuerza, lo que significa que tienes que golpear la pelota contundentemente de modo que no importa dónde acabe, siempre y cuando acabe dentro del arco.

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Consejos

Prepárate para una caída dura sobre tu espalda. Para disminuir este dolor, trata de caer sobre algún costado en vez de hacerlo directamente sobre tu espalda.

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