Béisbol: ¿Por qué hay una distancia de 60 pies y 6 pulgadas del montículo al home?

De acuerdo al reglamento del Béisbol, la distancia entre el frente de la placa del pitcher (un rectángulo de caucho de 24 por 6 pulgadas, ubicado en el montículo) y la parte de atrás del home plate, debe ser exactamente de 60 pies, 6 pulgadas (18.44 metros).

Esta distancia no es casualidad y tiene una intención, ya que ubica al montículo lo más en medio posible del diamante.

Sin embargo, no siempre fue así. El reglamento Knickerbocker de 1845 no fijaba una distancia específica, y hacia la década de 1870, los lanzadores simplemente se ubicaban en un cuadro (no había montículo) ubicado a 45 pies de home (muy similar al cricket, aunque sin permitirle al pitcher iniciar su lanzamiento avanzando, como en ese deporte).

Esa distancia funcionó por algún tiempo, hasta que los lanzadores comenzaron a especializarse y mejorar. El primer juego perfecto en la historia de Grandes Ligas en 1880, realizado por Lee Richmond y el segundo, conseguido por John Montgomery Ward apenas cinco días después, marcaron la necesidad de realizar un ajuste en las medidas reglamentarias.

Tras retrasar la zona del lanzador a una distancia de 50 pies, en 1887 se obligó a los pitchers a iniciar sus envíos con sus pies ubicados a 55.5 pies de home.

Finalmente, la Liga Nacional decidió en 1892 eliminar el cuadro de lanzamiento y establecer el montículo, fijando la distancia a home plate en 60 pies. Se dice que las 6 pulgadas extras son producto del error de la persona que instaló la placa del pitcher por primera vez, equivocación que después fue reglamentada.

Twitter @luismiguelgp

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