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En Chile, cada vez que se compra pan, arroz o algún otro producto o servicio, el IVA no perdona. Hablamos del Impuesto al Valor Agregado que recauda más del 40% de los impuestos en Chile.

“Todo el mundo podría estar de acuerdo en que se logra el financiamiento buscado, pero la pregunta es si esa forma de financiamiento es adecuada en términos de distribución de la carga, que sea justa conforme a la capacidad contributiva de las personas”, comentó Francisco Saffie, académico de la Universidad Adolfo Ibáñez.

En la misma línea, indicó que “todos podemos contribuir con el IVA, pero quien tiene menor capacidad de ahorro proporcionalmente contribuye más que quien tiene más posibilidad de ahorro“.

Por otra parte, Rodrigo Cerda, académico de Derecho de la Universidad Católica, apuntó que “lo que hay que hacer es no poner tanto impuesto a la inversión, pero si no lo pones en la inversión lo que te queda es ponerlo más al consumo y eso es lo que observas en el IVA”.

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Inicialmente, el IVA era de un 20%. En la dictadura de Augusto Pinochet se bajó al 16% y, luego, Patricio Aylwin lo subió al 18% y quedó en 19% con Ricardo Lagos. Ante la demanda de mejores pensiones este 2020 volvió a aparecer el IVA como potencial candidato para financiar las necesidades de esa área.

¿Y cuánto recauda Chile por impuestos? El país tiene una carga tributaria de 21%, lejos de los líderes Finlandia (46,1%) y Dinamarca (44,9%). El promedio de los países de la OCDE es de 34%.

Según la Tax Foundation, el 6,7% de la recaudación nacional viene de impuestos individuales, 22,1% a las empresas y más de la mitad por impuesto al consumo. Pagamos menos que la OCDE en impuestos personales, más en términos corporativos y mucho más en el consumo.

Con esos números en la mano, ¿quién debe pagar la cuenta en Chile? Saffie sostiene que “necesitamos lograr una ley de la renta que efectivamente grave a quienes tienen un ingreso superior“. En tanto que Cerda apuntó que “hoy esos impuestos son complicados, uno por tema político, dos por distorsiones y tres porque puede generar una reacción importante en la sociedad. Otra pregunta es por qué no ponemos más énfasis en crecimiento económico”.

Es en esta discusión que surgen dos conceptos clave. Usar maniobras que violan la ley para pagar menos impuestos es evasión, en tanto que elusión es usar vías legales para reducir los impuestos a pagar. Según el cálculo del ex director del Servicio de Impuestos Internos, Michel Jorratt, en Chile se evade entre 7 y 8 puntos el PIB. 

Probablemente el país no necesitaría todos los cambios que se están proponiendo hoy si ese 40% de evasión o elusión estuviera en arcas fiscales“, destacó Javier Jaque, académico de la Facultad de Economía y Negocios de la U. de Chile, quien agregó que “sancionar a aquellos que pagan impuestos porque otros los eluden puede ser desproporcionado y puede incentivar a que quienes pagan se desincentiven a pagarlos”.

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“Está la idea de que disminuyendo las obligaciones tributarias puedo maximizar mi propia utilidad, sin darme cuenta que soy parte de un todo“, precisó Saffie.

Otro factor a considerar en la ecuación son las exenciones, es decir, beneficios tributarios que se aplican en Chile como el menor impuesto que pagan los camioneros por el diesel. Revisar estas exenciones está en los planes del gobierno.

La discusión no es fácil y en Chile no han faltado propuestas controversiales como el impuesto a los super ricos que algunos expertos consideran una solución poco eficiente, pero que está lejos de ser nuevo en el mundo.

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