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Aprender a escribir música es una habilidad valiosa si quieres transportar la hermosa complejidad de la música que escuchas en tu cabeza. Afortunadamente, la tecnología nos permite producir fácilmente partituras y transportar la música directamente en el pentagrama. Si quieres aprender a hacerlo de la manera antigua, aunque debas empezar con lo básico y después desarrollar composiciones más complejas, lee el primer punto para más información.
Pasos
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Descarga e imprime algunos pentagramas en blanco. Las partituras se escriben en pentagramas en blanco donde puedes escribir notas, silencios, matices, etc., para guiar a los instrumentistas cuando toquen la pieza.
- Si quieres escribir partituras a mano como lo solían hacer Mozart o Beethoven, no te molestes en usar una regla para dibujar el pentagrama. En su lugar, imprime pentagramas en blanco para que los puedas empezar a llenar rápidamente con tus composiciones.
- En muchas páginas web puedes establecer con anticipación la clave y agregar el símbolo de la clave de sol o de fa (las más usadas comúnmente). Configura los pentagramas como los desees, descárgalos e imprímelos.[1]
- Imprime muchos pentagramas para practicar y comienza a escribir a lápiz tus composiciones, porque puede ser un asunto difícil plasmar tus ideas complicadas en el papel y, al usar lápiz, puedes borrar lo que desees y hacer pequeños cambios sin necesidad de volver a escribirlo todo.
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Descarga un software de composición musical. Si quieres componer en tu computadora, puedes usar un software para: arrastrar y soltar las notas, hacer cambios rápidos y revisiones, te proporciona un acceso rápido y también guarda tus composiciones de forma rápida. Componer en la computadora se hace cada vez más popular en los compositores contemporáneos, pues te ahorra tiempo y esfuerzo si quieres escribir música.
- El MusicScore es un software muy popular, fácil de usar y compatible con cualquier estilo de composición o entrada para teclados midi. Puedes grabar directamente en el pentagrama o escribir tu pieza nota por nota. [2] La mayoría de los softwares de composición también incluyen reproducciones midi para que puedas escuchar lo que acabas de escribir, en versión digital.
- El GarageBand es un software que viene en las Mac más recientes y se puede utilizar para escribir música si seleccionas la opción “Songwriting”. Puedes grabar en vivo o conectar un instrumento directamente y transcribir la música en notación musical, después seleccionar el ícono de una tijera en la esquina inferior izquierda para revisar las notas.
- Descarga el software y comienza un nuevo proyecto para que grabes lo que has compuesto. Si conectas un teclado midi a una computadora con un cable USB, podrás reproducir la melodía directamente en el software y la pondrá en el pentagrama. ¡Es muy sencillo! Incluso puedes superponer cada parte y asignarla a instrumentos diferentes para empezar a componer una sinfonía.
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Regístrate en línea para que puedas componer gratuitamente. También existen comunidades de compositores y lectores de partituras que componen y juntan su música. Al igual que el uso de software de composición, puedes componer tus melodías en línea y guardar lo compuesto. Luego de ello, puedes publicarlo y obtener opiniones de otros compositores o dejarlo en privado y acceder a tu composición desde cualquier lugar.
- Noteflight es una de estas comunidades y es un excelente recurso para aprender a leer y escribir música, escuchar las composiciones de otras personas y postear tus composiciones.
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Elije un instrumento o un grupo de instrumentos para componer. ¿Quieres incluir unas líneas de trompeta en una canción de R&B? o ¿Agregar algún instrumento de cuerda en una balada? Es más común trabajar en una frase musical o en un solo instrumento a la vez y después, cuando ya tengas lo primero listo, ocuparte de la armonía y el contrapunto. Las composiciones sinfónicas incluyen:
- Instrumentos de viento: la trompeta (en si bemol), el saxofón (en mi bemol) y el trombón (en si bemol)
- Un cuarteto de instrumentos de cuerda: dos violines, la viola y el cello
- Acompañamiento de piano
- Las voces
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Escribe la clave en el pentagrama. Una partitura está compuesta por notas y silencios que están impresos en 5 líneas paralelas y los espacios que hay entre ellas, el conjunto de todo lo mencionado forma el pentagrama. Las líneas y espacios se cuentan de abajo hacia arriba, significa que las notas más altas van a estar en la parte superior del pentagrama. El pentagrama puede estar en clave de sol o en clave de fa, la indicación de ello estará en su margen izquierdo. La clave te indicará qué línea o espacio le corresponde a cada nota:
- En la clave de sol, notarás un símbolo parecido a “&” en el margen izquierdo del pentagrama. Esta es la clave más común en una partitura. La guitarra, la trompeta, el saxofón y los instrumentos con mayor registro están en clave de sol. Las notas, si empiezas desde la línea de abajo hacia la última de arriba, son: mi, sol, si, re y fa. Las notas que están entre las líneas, si comienzas desde el espacio entre la primera y segunda línea, son: fa, la, do y mi.
- En la clave de fa notarás un símbolo parecido a un número “7” curvado en el margen izquierdo del pentagrama. La clave de fa se usa para instrumentos con menor registro como el trombón, el bajo y la tuba. Si empiezas desde la línea de abajo hasta la última de arriba, las notas son: sol, si, re, fa y la. Las notas entre las líneas, si comienzas desde abajo hacia arriba, son: la, do, mi y sol.
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Escribe la signatura del compás. Las signaturas del compás indican cuántas notas y el ritmo que debe haber en cada compás. En el pentagrama, cada espacio estará separado con dos líneas verticales, las cuales dividirán el pentagrama en pequeños espacios de notas. Justo al costado de la clave habrá dos números uno sobre otro, como una fracción. El número de arriba representa el número de tiempos de cada compás y el número de abajo representa el valor de cada uno de los tiempos del compás.
- En la música country, la signatura de compás más común es 4/4, lo que significa que hay cuatro tiempos en cada compás y la negra lleva el ritmo. Una signatura de compás de 6/8 significa que hay 6 tiempos en cada compás y que la corchea lleva el ritmo.
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Establece la armadura. Más información que se podría incluir estará a la izquierda de cada línea del pentagrama (como sostenidos o bemoles), armadura que deberás seguir a lo largo de toda la pieza. Un sostenido hace que una nota suba medio tono, mientras que un bemol hace que una nota baje medio tono. Ambos pueden aparecer a lo largo de la pieza para usos ocasionales o pueden aparecer al comienzo y debes seguirlos a lo largo de la pieza.
- Por ejemplo, si ves un sostenido en el primer espacio de la clave de sol, sabrás que cada nota que aparezca en ese espacio tendrá que ser tocada en medio tono más alto (sostenido). De la misma manera con los bemoles.
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Aprende los diferentes tipos de notas que vas a usar. En el pentagrama estarán impresos diferentes tipos de notas y silencios. El estilo de la nota se refiere a su duración y la ubicación de la nota en el pentagrama se refiere al tono de la nota. Las notas están hechas de cabezas, los cuales son puntos o círculos y palitos, estos últimos van desde la cabeza de la nota hacia arriba o hacia abajo, dependiendo de la ubicación de la nota.
- Las redondas parecen óvalos y duran cuatro tiempos.
- Las blancas se parecen a las redondas, pero tienen un palito. Su duración es de 2 tiempos. En una signatura de compás 4/4, podrían haber dos blancas por compás.
- Las negras tienen cabezas negras y palitos. En una signatura de 4/4, podría haber cuatro negras por compás.
- Las corcheas se parecen a las negras pero con pequeñas banderas al final del palito. En la mayoría de los casos, las corcheas se agrupan con barras para indicar el ritmo y sean más fáciles de leer.
- Los silencios siguen reglas similares. Cada silencio de redonda parece una barra negra en la línea media del pentagrama, mientras que los silencios de negra se parecen a la letra “K” en cursiva.
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Dedica tiempo a aprender otras partituras. La música country tiene un lenguaje simbólico complicado que necesitas aprender si es que la piensas escribir. Así como no podrías escribir una novela sin saber leer palabras u oraciones, no podrías escribir música si no sabes leer las notas y los silencios. Antes de escribir en partituras, desarrolla un sólido conocimiento en:
- Las diferentes notas y los silencios
- Las líneas y los espacios del pentagrama
- Los marcadores de ritmo
- Los matices
- La armadura
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Escoge el instrumento en el que vas a componer. Algunos compositores componen con un lápiz y un papel, otros componen en guitarra o piano y otros componen con un corno francés en la mano. No hay una manera correcta de empezar a escribir música, pero te resultará útil poder tocar tú mismo para practicar pequeñas frases musicales en las que quieres trabajar y escuchar cómo suenan.
- Toca algunas notas en el piano, es muy útil para los compositores, ya que el piano es el instrumento más visual. ¡Todas las notas están ahí, frente a ti!
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Comienza con una melodía. La mayoría de las composiciones comienzan con una melodía o una frase musical que seguirá y se desarrollará a lo largo de la composición. Esta es la parte de una canción que todos tararean. Así escribas la partitura para un solo instrumento o comiences a componer tu primera sinfonía, la melodía es por donde debes empezar cuando quieras componer.
- Cuando comiences a componer, pueden ocurrir pequeños accidentes. Ninguna pieza llega totalmente formada y perfecta. Si quieres expandirte con tu melodía, improvisa en el piano o cualquier otro instrumento que desees y sigue tu inspiración a donde te lleve.
- Si quieres experimentar, explora el mundo de las composiciones aleatorias. Empieza con otro tipo de composiciones como John Cage, composiciones aleatorias en las que se agrega un elemento mientras compones: tira los dados para determinar la siguiente nota en una escala de 12 tonos o consulta el i ching para incluir notas. En algunos casos, estas composiciones pueden sonar disonantes, pero también sería una buena manera de crear frases musicales y melodías innovadoras.
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Anota fragmentos musicales y después júntalos para hacer que la música se exprese. Una vez que comiences con la melodía, ¿cuál es el siguiente paso?, ¿qué es lo que debes hacer?, ¿cómo un grupo de notas se convierten en una composición? Como no hay una respuesta sencilla para descifrar el código de Mozart, es bueno comenzar por pequeños fragmentos llamadas frases musicales y poco a poco construir toda la pieza. ¡Ninguna pieza llega completamente formada!
- Trata de agrupar las frases musicales por las emociones que producen. El guitarrista John Fahey, instrumentalista autodidacta y compositor, combinó en sus composiciones pequeños fragmentos por la “emoción”, así no provengan de la misma clave ni suenen como si fueran juntos. Si diferentes frases musicales son caprichosas, tristes o melancólicas, él las combinaría para componer una canción.
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Acompaña la melodía con un acompañamiento armónico. Si escribes para un instrumento de cuerda (un instrumento capaz de tocar más de una nota al mismo tiempo) o escribes para más de un instrumento, también necesitarás componer un acompañamiento armónico para darle contexto y profundidad a tu melodía. La armonía es el siguiente paso de una melodía y proporciona una oportunidad para la tensión y resolución.[3]
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Enfatiza la música con matices. Las buenas composiciones deben crecer y decrecer (en sonido). Se debe enfatizar los momentos de emoción extrema con matices más fuertes.
- Puedes indicar los cambios en la partitura con palabras italianas que indican descripciones básicas de fuerte y suave. “Piano” significa que debes tocar suavemente y usualmente está escrito debajo del pentagrama cuando la música debe ser tocada silenciosamente. “Forte” significa que debes tocar fuertemente y está escrito en el mismo lugar que “Piano”.
- Las graduaciones de sonido pueden ser indicadas debajo del pentagrama por un dibujo alargado de estos símbolos: “<” o “>”, donde la música irá "crescendo" (se volverá más fuerte) o "decrescendo" (el sonido disminuye).
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Debe ser sencillo. En función de tus ambiciones de la pieza, es posible que desees muchos fragmentos y poli ritmos complejos o una melodía sencilla de piano. No le tengas miedo a la simplicidad. Algunas de las piezas más emblemáticas y memorables son simples y muy elegantes.[4]
- La “Gymnopedie No.1” de Erik Satie es un clásico ejemplo de simplicidad. Esta pieza ha sido empleada un sinfín de veces en anuncios y películas, pero hay algo hermoso y conmovedor en sus notas simples y su ritmo lento.
- Las variaciones de Mozart en “¿Estrellita dónde estás?” es un ejemplo de convertir una de las canciones de niños más conocida en un complejo ejercicio de variación y adorno.[5]
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Consejos
- Diviértete y experimenta con diferentes posibilidades.
- No utilices notación musical muy complicada si planeas darle tu composición a alguien más para que la toque o asegúrate de que la otra persona la entienda.
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Advertencias
- Asegúrate de usar lápiz primero. Componer puede tornarse algo desordenado.
- Tus notaciones musicales no deben ser entendidas por nadie más, a menos que tú les digas a las personas cómo se debe tocar tu composición.
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Referencias
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