La Balsamina posee muchos usos terapéuticos, pues retrasa el crecimiento de algunas células cancerosas.
Se trata de un remedio para tratar la diabetes, el cáncer y varias infecciones.
Según revistas especializadas en salud, en pruebas de laboratorio, una proteína en la balsamina llamada MAP-30 mata a los virus y retrasa el crecimiento de algunas células cancerosas.
Además, tiene grandes propiedades antioxidantes y protege a la mucosa del estómago de diversas afecciones, por ello se indica en la gastritis.
El único problema es que la balsamina sabe extremadamente amarga.