AHORA, CON AMBAS MANOS

Una nueva teoría neurológica señala que volverse ambidiestro permite también utilizar mejor las capacidades intelectuales,

4 de mayo de 1992


UN GRUPO DE neurólogos sostiene que la capacidad de usar hábilmente las dos manos indica también ventajas en la forma de utilizar el cerebro. Pero si usted no está entre el 14 por ciento de la población que nace ambidiestra, esta destreza puede ser aprendida. La pregunta es ¿qué ventajas tiene ser ambidiestro? La más evidente es para aquellos que practican deportes o realizan actividades -como la danza que requiere simetría en los movimientos.
También mejora el desempeño atlético pues ayuda a mantener el balance de los músculos. Pero los investigadores sugieren que también puede aumentar la creatividad y la organización.
Recientes estudios han demostrado que, con el entrenamiento adecuado, se puede obtener la misma habilidad en las dos manos. Pero la discusión científica no es torno a si se puede o no ser ambidiestro sino si gracias a ello se puede ganar acceso a mayores funciones cerebrales. Intelectual y físicamente el cerebro está dividido en dos hemisferios. Cada lado controla las funciones motoras del lado opuesto del cuerpo; asimismo el lado izquierdo es más analítico mientras el derecho es más creativo. Estadísticamente se ha demostrado que los diestros son mejores en matemáticas (hemisferio izquierdo) y los zurdos son más imaginativos (hemisferio derecho). Famosos artistas han sido zurdos como Picasso, Miguel Angel, Rafael y Paul Klee.
Pero ¿pueden los diestros y los zurdos adquirir nuevas capacidades simplemente por aprender a usar su mano izquierda o derecha? "Es posible -dice el neurólogo Jerid Fisher. Teóricamente, si un diestro empieza a utilizar su maro izquierda, puede ser capaz de utilizar más el poder creativo de su hemisferio derecho". Pero ser ambidiestro podría incluso ser una ventaja en caso de un accidente o daño cerebral. Según Fisher y sus colegas al ser bilateral -es decir, repartir más tareas entre los dos hemisferios del cerebro- puede ayudar. Entre más informaciones sean compartidas por los dos hemisferios del cerebro, será más fácil compensar ese daño. -