hacedor

hacedor, a

1. adj./ s. Que hace, en especial Dios para los cristianos, Dios es el sumo hacedor.
2. s. ADMINISTRACIÓN Persona que administra una hacienda.
Gran Diccionario de la Lengua Española © 2022 Larousse Editorial, S.L.

hacedor, -ra

 
adj.-s. Que hace alguna cosa.
Encargado de administrar una hacienda.
Diccionario Enciclopédico Vox 1. © 2009 Larousse Editorial, S.L.

hacedor, -ra

(aθe'ðoɾ, -ɾa)
abreviación
que hace alguna cosa Los artistas son hacedores de mundos.

hacedor, -ra


sustantivo masculino-femenino
persona o ser que hace alguna cosa Descubrieron que era un hacedor de embustes y estafas.

hacedor


sustantivo masculino
denominación usada para referirse a Dios como creador de todo lo que existe las maravillas del Hacedor
Kernerman English Multilingual Dictionary © 2006-2013 K Dictionaries Ltd.
Traducciones

hacedor

doer, maker

hacedor

SM/F (gen) → maker (Literat) → poet
el (Supremo) Hacedorthe Creator, the Maker
Collins Spanish Dictionary - Complete and Unabridged 8th Edition 2005 © William Collins Sons & Co. Ltd. 1971, 1988 © HarperCollins Publishers 1992, 1993, 1996, 1997, 2000, 2003, 2005
Ejemplos ?
Tal fue la derrota de Sabio Pez-Tierra por los engendrados Maestro Mago, Brujito. “Hacedor de Montañas”, dice el relato de antaño.
Purísima inocente criatura, del Hacedor privilegiada hechura, que en opresión viviste y en tormento, ¿qué premio alcanza tu virtud segura?
He aquí en seguida la Gesta de Sabio Pez-Tierra, primer hijo de Principal Guacamayo. “Yo hacedor de montañas”, decía Sabio Pez-Tierra.
Reúne Sangre, Hacedor de Traición, Hacedor de Infortunio, Gavilán, Opresión, que habían formado el discurso para los Búhos. “¿Los jefes Supremo Muerto.
El alma, a la que Dios sólo ennoblece, pues no puede venir de otro tal gracia, conforme a su Hacedor calidad tiene; y así de perdonar nunca se sacia a aquel que, si en la faz triste parece, después del yerro a disculparse viene.
Y este suplicio duró treinta noches, al cabo de las cuales fray Andrés de Talamantes, completamente loco, entregó el alma al Hacedor.
Quiero ser labrador de celajes, sembrador de los empíreos huertos, hacedor de las flores galaxiales, constructor de la arboleda cósmica y edificar con sus presencias equiláteras universos de portentos cuadrafónicos, portentosos universos de universos, cuatrocientas voces al silencio, cenzontles destructores de la inercia.
Dice también el mismo sabio y discreto autor que es Dios los que creyeron era un espíritu, que con movimiento y discurso gobierna: el mundo; con cuyo sentir, aunque no alcanzó un conocimiento exacto y genuino de la verdad (porque el Dios verdadero no es precisamente el alma del mundo, sino más bien el Criador y Hacedor de este espíritu), con todo, si pudiera eximirse de las opiniones que estaban ya tan recibidas por la costumbre, confesara y persuadiera eficazmente que se debía adorar a un solo Dios, que con movimiento y razón el Universo; de modo que sobre este punto sólo quedara con la indecisa la cuestión y duda en cuanto que es espíritu, y no como debiera decir, Criador del alma.
Cómo no es posible a la más hábil pluma ni pincel, describir jamás. Hay ciertas cosas que el Supremo hacedor se reserva solo para sí, y deja burladas las atrevidas pretensiones de la criatura.
Reúne Sangre: su cargo: los hombres que tienen flujos de sangre. He aquí también a los jefes Hacedor de Abscesos. Hacedor de Ictericia; su poder: dar a los hombres tumores, darles abscesos en las piernas y amarillearles el rostro, lo que se llama ictericia, y éste era el poder de Hacedor de Abscesos, Hacedor de Ictericia.
Al fin, con voz doliente y lastimera dijo, al polvo volviendo la seca calavera: «¡Ay si de aquella en cuya lumbre vivo y por quien ser del Hacedor recibo memoria fueras, último despojo, calavera espantosa, con cuán sagrado afán te recogiera!
París, 23 de enero de 1844 En el nombre de Dios todo Poderoso a quien conozco como Hacedor del Universo: Digo yo José de San Martín, Generalísimo de la República del Perú, y Fundador de su libertad, Capitán General de la de Chile, y Brigadier General de la confederación Argentina, que visto el mal estado de mi salud, declaro por el presente Testamento lo siguiente: 1º- Dejo pr.