Conozca las bondades del agua de guineo, remedio que curó a Alex Badilla

Esta semana el maquillista Alex Badilla contó las maravillas de beber agua de guineo.

Le fue tan bien que se recuperó pura vida de la hepatitis que lo tuvo feo y ahora solo habla maravillas de este tipo de remedios, que según la sabiduría popular, lo único que no curan es la muerte.

“Estoy tomando dos remedios que me curaron increíblemente. Gente mayor me empezó a escribir para decirme que eso lo que tenía que tomar para sanar el hígado porque era lo mejor para el tipo de hepatitis que me atacó”, aseguró el también cantante.

Así que Badilla se fue a buscar plantas de guineo, cortó la mata y a un pedazo le hizo un hueco y empezó a recoger el líquido que soltaba y se lo empezó a mandar todos los días en ayunas. Al final lo que Alex llamó agua o jugo de guineo es el conocido vinagre de guineo que es muy rico con las ensaladas.

Para bajar la bilirrubina (líquido que está en el hígado y se riega en el cuerpo, lo que provoca que el enfermo se vea amarillo) tomó gavilana, por lo que ahora no se extrañe si lo ven jalando botellas con remedios caseros.

Remedios heredados

Lo que este personaje hizo es una tradición heredada de nuestros abuelos y es uno de los principales negocios en los mercados y macrobióticas.

Si le duele la espalda, tiene el colesterol alto o quiere bajar de peso los vendedores de hierbas le dan la receta, aunque sepa mal, en la mayoría de los casos la gente defiende su eficacia.

El botánico Diómedes Ureña asegura que la medicina natural es muy eficiente para atender muchos males.

“En el caso del vinagre de guineo es un antioxidante muy fuerte que sirve para limpiar el hígado y el colon. La gavilana controla la bilirrubina cuando está descoordinada y no está trabajando”, explicó el experto.

Ureña aseguró que además de estas plantas existen otras 32 para desinflamar el hígado, limpiar la vesícula y la sangre que pueden estar en las casas de las personas y no representan un peligro porque tradicionalmente se han usado a lo largo de los años

La receta sanadora

Lo primero que le recomendamos es no complicarse buscando una planta de guineo para hacer el vinagre y cocinarlo en la casa. En los puestos tradicionales que venden hiervas es posible conseguir las botellas con el vinagre listo.

Diómedes explica que ataca las bacterias que alteran la función normal del hígado, producto de los malos hábitos alimenticios.

“Como el vinagre es dulce las bacterias se van eliminando poco a poco porque eso es lo que se tiene en el hígado, muchas bacterias porque está cerquita del estómago” explicó el botánico.

La forma correcta de tomarlo es en las noches antes de acostarse y solo se necesita una cucharada pequeña (como la de los bebés) durante 30 días para ver los resultados.

Eso sí, advierte que se debe llevar un control con el médico para evitar que el potasio suba más de lo debido porque este producto es alto en este mineral, lo que podría provocar otros problemas en lugar de curar.

Gavilana al rescate

Ureña asegura que la gavilana se usa cuando por el hígado la sangre no pasa bien y por eso la gente se pone amarilla. Tomar la hierba hace que la bilirrubina pase por el hígado como se debe.

Para prepararla se deben tomar tres hojas por cada taza de agua, el agua tiene que estar a punto de hervir, se prepara como si fuera un té.

Recomienda que solo se tome por 15 días y siempre en la noche, no por la mañana porque es un producto caliente, lo que hace que su efecto sea mejor cuando el cuerpo va descansar porque en ese momento es más absorvente y hace más efecto.

No se debe tomar todo el tiempo porque baja la hemoglobina (pigmento rojo de la sangre).