"Haz lo que quieras"

"Haz lo que quieras"

    La idea del 'haz lo que quieras', propuesta por Fernando Savater, autor del libro Ética para Amador, nace de la misma frase. Plantear el hecho de hacer lo que cualquier persona quiera, trae consigo muchas más implicaciones que sólo satisfacer el deseo o la inquietud de alguien por experimentar una acción 
      
      
      
     
    "Sea lo que sea que hagas en la vida, será insignificante, pero es importante que lo hagas".
    Mahatma Gandhi
     
     
    Hacer cualquier cosa, como dijo alguna vez Mahatma Gandhi, pensador y defensor del pueblo hindú, parecerá sin sentido o sin relevancia para personas externas e incluso para el mundo en general, pero ese hecho o acción será de gran importancia para la persona que lo lleve a cabo.
    La idea del "haz lo que quieras", propuesta por Fernando Savater, autor del libro Ética para Amador, nace de la misma frase. Plantear el hecho de hacer lo que cualquier persona quiera, trae consigo muchas más implicaciones que sólo satisfacer el deseo o la inquietud de alguien por experimentar una acción. El contexto de esta propuesta nace incluso en la ética y la manera en la que Savater la describe.
    Podemos entender como ética desde lo que explica el escritor, que es el arte de vivir y saber vivir y, al mismo tiempo, es el estudio de la moral y la suma del planteamiento de los "¿por qué?" y demás cuestiones. Hablar de "hacer lo que quiera", a mi parecer, enfrenta dos cuestiones importantes: la primera de ellas es el uso de la libertad y la manera en que ésta es empleada por el ser humano; la segunda, respecto al respeto y cuidado de las personas que rodean al ser humano en cuestión.
     
     
    ¿Qué significa realmente "haz lo que quieras"?
     
     
    Los modelos mentales y las perspectivas que tiene cada persona determinan la manera en la que entiende las cosas. "Haz lo que quieras" puede tener muchos y muy variados significados debido a las diferentes interpretaciones que cada persona le otorgue a la frase.
    Esta cuestión puede significar para muchos individuos ser libre, hacer pleno uso de la libertad; libertad de elegir, de buscar la felicidad, libertad de hacer lo que nos conviene, libertad de hacer uso de las frases: "lo que yo quiero", "como yo lo quiero", "cuando yo quiero" y  el "porque yo quiero" que, en muchas ocasiones, las convierte en la respuesta al porqué del actuar de las personas.
    Por otra parte, "haz lo que quieras", desde el punto de vista de la filosofía o la ética, recibe una interpretación completamente diferente. Por ejemplo, Epicuro, filósofo griego, planteaba el hedonismo y, a través de esta doctrina, transmite la idea de que la felicidad se encuentra en el placer. Es por ello que para Epicuro "haz lo que quieras" significa que sea cual sea la decisión que una persona debe tomar, la elección que haga la debe llevar al placer, evitando siempre el dolor y obteniendo finalmente la felicidad.
    El filósofo y científico de la antigua Grecia, Aristóteles, propuso la idea del eudemonismo, en la cual explica que todos los seres humanos por naturaleza buscamos la felicidad. Entonces de acuerdo con esta teoría, "haz lo que quieras"  significa que cada persona debe hacer todo aquello que la lleve a ser felices.
    Pareciera que la idea de "Haz lo que quieras" es una frase egoísta, que aplica el ser humano para satisfacer sus necesidades, gustos o caprichos. Es por ello que el utilitarismo, teoría propuesta por John Stuart Mill y Jeremy Bentham, propone buscar la mayor felicidad para el mayor número de personas y, a menos que la idea "haz lo que quieras" sea aplicada por una persona en extremo filantrópica, para una persona promedio "haz lo que quieras" se entiende mejor como buscar hacer las cosas de manera que su misma persona se vea beneficiada.
    Finalmente, "haz lo que quieras" según Fernando Savater, como le menciona en su libro Ética para Amador, afirma: "Hay que dejarse de órdenes y costumbres, de premios y castigos; en una palabra, de cuanto quiere dirigirte desde fuera, y que tienes que plantearte este asunto desde ti mismo, desde el fuero interno de tu voluntad. No le preguntes a nadie qué es lo que debes hacer con tu vida: pregúntatelo a ti mismo. [...] Interroga sobre el uso de la libertad... a la libertad misma".
    Como se puede percibir, para Savater "haz lo que tú quieras" significa, en efecto, hacer lo que cada persona quiera, hacer uso de la libertad pero, al mismo tiempo, hacer las cosas que una persona de verdad quiere, no por impulso o necesidad inmediata, sino porque la acción representa el ejercicio de la libertad y de la ética: que la acción represente el acto de saber vivir.
     
     
    ¿Qué implica hacer lo que uno quiere?
     
     
    "¡Porque a mí me dio la gana!": esta es una frase común entre las personas que defienden que hacen lo que quieren porque ellos quieren hacer eso. Pero, considerando diferentes perspectivas y situaciones, ¿qué hace una persona cuando hace lo que quiere? ¿Qué implica realmente hacer lo que uno quiere?
    Todo depende la situación: las personas toman decisiones en base a sus sentimientos, hacen lo que "les dice su corazón" o hacen lo que quieren porque su mente decidió que eso era lo correcto o lo necesario. Hacen lo que quieren en base a su instinto, por supervivencia o, incluso, las personas hacen lo que quieren basándose en las normas de la sociedad o, como diría Kant, por deber, como norma principal de la sociedad.
    Sea cual sea la razón por la cual los individuos actúan de cierta manera, hacer lo que uno quiere implica de manera fundamental tomar una decisión. Es ahí donde todo comienza y la razón por la cual el mundo de los seres humanos está en constante cambio y, al mismo tiempo, la razón por la cual existen o pasan las cosas, porque todos tomamos decisiones, todos llevamos a cabo actos que impactan a las demás personas y, sobre todo, que nos impactan a nosotros mismos.
    Nuestra vida se compone de la suma del actuar de nosotros mismos, de nuestras decisiones, nuestras ideas, nuestros sueños y de manera elemental de nuestros actos. Vamos por la vida "haciendo lo que queremos" o, al menos intentándolo, y esa es nuestra manera de vivir.
    Algo muy importante a considerar sobre "hacer lo que queramos" es analizar la razón por la cual tomamos las decisiones y actuamos de cierta manera. Lo ideal es que nuestro actuar provenga de nuestra libertad, que consiste en elegir, de nuestra autonomía y nuestro libre albedrío. Es por ello que, si como individuos, queremos realmente ejercer nuestra libertad y autonomía, debemos tener cuidado de las influencias externas, porque todas ellas pueden interferir en la manera que razonamos y analizamos las cosas y, por consecuencia, en las decisiones que tomemos.
    Estas influencias pueden ser materiales, como el dinero o no materiales como nuestro propio beneficio o seguridad, pero también pueden ser las personas con las que convivimos y de las cuales nos rodeamos todos los días, nuestros padres, la familia, el novio o la novia, los amigos, etc.
    Habiendo considerado esto, otro asunto que es importante analizar es: ¿Qué es lo que se necesita para hacer lo que cada persona quiere? Las respuestas a esto pueden ser las ganas, los deseos, las inquietudes, las necesidades, las dudas, las motivaciones... En fin, muchas cosas son las que sirven de motor para tomar decisiones y llevar a cabo una acción, pero ese motor, es de hecho siempre la razón que impulsa a la acción.
    Retomando la idea del escritor que nos planteó la idea de "haz lo que quieras", Savater explica en su libro que hacer esto implica pensar siempre a fondo las cosas y también pensar con detenimiento qué es lo que queremos, porque de esa manera ejercemos nuestra libertad de manera correcta, y logramos también tener una vida basados en la ética.
    "La ética es el arte de elegir lo que más nos conviene y vivir lo mejor posible", dice Savater. Entonces, para el escritor, todo se trata sobre elegir, tomar decisiones, tener sueños y buscar alcanzarlos. Analizar las opciones, convivir con otros seres humanos, darse la buena vida.
     
     
    ¿Es correcto que un ser humano haga lo que quiera?
     
     
    Existen en el mundo poco más de 7 mil millones de personas. Si cada uno de ellos hace lo que quiere, ¿no sería el mundo entonces un completo caos? Pero, y si nadie busca hacer lo que quiere y esto lo hace infeliz, ¿qué pasaría con los seres humanos?
    Ante esta disyuntiva, entre hacer lo que queramos y no hacerlo, nace este dilema ético: ¿es correcto que un ser humano haga lo que quiera? Desde un punto de vista sencillo y práctico: por supuesto que es correcto que un ser humano haga lo que quiera. Existe desde hace años la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en la cual se estipula que la libertad es un derecho que todo ser humano tiene. Entonces hacer lo que uno quiere es correcto y aceptado por toda la humanidad, además, ¿no hemos hablado ya del eudemonismo de Aristóteles, que dice que todos buscamos ser felices porque está en nuestra naturaleza, o del hedonismo de Epicuro, que explica que todos buscamos evitar a toda costa el dolor y buscar siempre nuestro placer? Buscamos lo bueno como aquello que nos beneficie; entonces, hacer lo que nosotros queramos siempre será algo conveniente para nosotros.
    Podemos afirmar que hacer lo que uno quiere es lo mínimamente necesario para que las personas forjen su propia identidad y que, como consecuencia, un individuo pueda desarrollarse como persona a través del cumplimiento de su sueños, sus metas y sobre todo de su proyecto de vida.
    La otra cara de la moneda en este dilema se refiere al por qué no es correcto que cada ser humano haga lo que quiera. Lo importante en este punto a considerar es que así como todos tenemos el derecho a ser libres, también tenemos la obligación de respetar a las demás personas. Algunas de las virtudes públicas que apoyan esta idea y que reafirman el hecho de que no es necesariamente correcto que cada ser humano haga lo que quiera son la justicia, la tolerancia, la solidaridad, etc. Es decir, como miembros de la sociedad, todos buscamos ser felices pero también debemos respetarnos unos a otros y respetar nuestros derechos humanos. Es por eso que hacer uso completo de nuestra libertad al "hacer lo que queramos", no nos lleva a una convivencia pacífica, lo cual implica que todos debemos cuidar nuestras acciones y no simplemente hacer lo que se nos de la gana.
    Para Savater "haz lo que quieras" es correcto cuando se lleva a cabo la acción considerando que se debe pensar a fondo y con detenimiento qué es lo queremos, porque de esa manera nuestras acciones nos permitirán darnos la buena vida y vivir éticamente, lo cual implica saber vivir y elegir, tomar decisiones sobre lo que más nos conviene y, que como seres humanos, tratemos de vivir lo mejor posible para intentar conseguir lo que para Savater es lo máximo a lo que podemos aspirar, que es la alegría.
    Pero entonces, ¿tenemos el derecho a ser libres?, ¿podemos hacer lo que queramos?, ¿somos realmente libres? Yo considero que la mejor respuesta a esto es con la frase famosa de Jean-Paul Sartre, que dice: "Mi libertad se termina donde empieza la de los demás".
    Otra manera de responder a la disyuntiva es como lo hizo John Stuart Mill en su obra Sobre la libertad, en donde decía que somos libres de hacer lo que queramos y tomar las decisiones que queramos mientras las consecuencias sólo nos afecten a nosotros mismos como individuos, y no somos libres de hacer lo que queramos cuando las consecuencias de nuestras acciones afectan de alguna manera a las demás personas.
    En conclusión, "haz lo que quieras" me obliga a pensar en las consecuencias en mi persona y las personas que me rodean, en mi presente y en mi futuro, en acciones éticas, en mi vida. "Haz lo que quieras" significa ejercer nuestra libertad a través de nuestras elecciones y decisiones. "Haz lo que quieras" implica tomar decisiones de manera sabia, analizando siempre qué es lo que más nos conviene como personas y para nuestro proyecto de vida.
    Es correcto hacer lo que queramos cuando las consecuencias de estas acciones nos afectan sólo a nosotros mismos. Estudiar estas cuestiones sobre hacer lo que uno quiera es importante porque de ahí nace la ética, del ¿qué quiero? A partir de ahí ejercemos nuestra libertad, buscamos nuestra felicidad y nuestro bienestar con un proyecto de vida que intentamos cumplir a través de nuestras acciones, las cuales llevamos a cabo a través de elecciones que hacemos ejerciendo nuestra libertad. Y es que, como diría Savater, "estamos condenados a ser libres".
     
    *Alumna del Campus Sinaloa
     
    Responsable
    Ernesto Diez Martínez Guzmán
    Comentarios
    diez.martinez@itesm.mx
    "Las opiniones expresadas en esta página son responsabilidad de sus autores. No necesariamente representan el punto de vista del Tecnológico de Monterrey".

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